No existe un manual que dicte cuánto necesitamos para manejar el malestar, ni que nos indique cuánto tiempo dura el dolor. En la comparativa nos encontramos con la exigencia, con la duda, y con la frustración. Seguramente, si nos paramos a escuchar, también encontraremos una voz en nuestro interior que nos diga “ estás tardando mucho”, “no lo estás haciendo bien”.
LA GESTIÓN DEL TIEMPO DEL DOLOR
La manera de mirarnos y de sentir es única, nuestros mecanismos de afrontamiento y nuestras maneras de hacer contacto son únicas. Por tanto, somos únicos y únicas a la hora de encontrarnos con nuestros conflictos y de marcar el tiempo y las estrategias para resolverlos.
Y una de las claves para hacer frente a esto, es poder entender que nuestro ritmo no es ni mejor ni peor, sino que es exactamente el que necesitamos. Es la brújula que nos marcará la dirección, es la guía que nos permitirá estar, y si es el espacio en el que ordenar nuestros puzzles.
¿Cuánto tiempo dura el dolor?
EL RITMO PARA SABER CUÁNTO TIEMPO DURA EL DOLOR
En el ritmo no tiene lugar el “tienes que”, sino que se le abre paso a un “lo que necesitas” y “lo que puedas”. Todos tenemos un ritmo único, pero es cierto que a veces nos cuesta entenderlo por la exigencia del entorno.
Afecto y cognición
Es importante entender que tenemos la tendencia a procesar el afecto con mayor lentitud que la cognición. Así como los procesos cognitivos se traducen en pensamientos, los cuales se pueden expresar con mayor facilidad en palabras, en los afectivos éstas no adquieren tanta importancia. La experiencia del afecto puede vivir se rápida, pero hablarla y pensarla puede ser un proceso más lento.
Falso ritmo
Tenemos que tener en cuenta que las personas podemos aprender falsos ritmos, y además, que esto pueda convertirse en algo habitual a lo largo de las experiencias de la vida. Puede ser que una persona, en sus experiencias tempranas, haya vivido la exigencia de dar una respuesta a algo que no sabía o para lo que no estaba preparada. Además, es posible que también se le haya castigado por no saber y avergonzado por ello. El falso ritmo se puede adaptar de tal forma que la persona no es consciente de que eso no encaja o que no está bien para ella. Por tanto, la inquietud se asume como si fuera parte de uno/a mismo/a.
Date la oportunidad de conocerte y atender tu malestar y tus necesidades como te mereces.
Escucha tu ritmo, escúchate a ti.
Psicología en Bilbao
Si la gestión del dolor te resulta una difícil tarea en el Centro DAMAR podemos acompañarte desde la Psicoterapia Integrativa en Bilbao.
Patricia Expósito Méndez
Codirector, Psicóloga General Sanitaria y Psicoterapeuta Integrativa del Centro DAMAR.
Bibliografía
Erskine R.G. (2017) Más allá de la empatía. Desclée de Brouwer.