Nutrición en el deterioro cognitivo

¿Qué relación existe entre la nutrición y el deterioro cognitivo? ¿Cuán importante es el papel de la nutrición en el deterioro cognitivo?

Sin ser un anticipo de demencia o de Alzheimer el deterioro cognitivo asociado al envejecimiento ocurre en 1 de cada 4 personas mayores de 60 años.

Con la edad se produce una disminución en la síntesis de ácido clorhídrico en el estómago, lo que dificulta la digestión y posterior absorción en el intestino de ciertas proteínas, vitaminas y minerales. La actividad física también disminuye con la edad, y con ello el apetito lo que se traduce en una menor ingesta de nutrientes. Además, la sensación de sed se ve alterada por lo que muchas veces suele aparecer deshidratación.

EFECTOS DE LA NUTRICIÓN Y EL DETERIORO COGNITIVO

Se ha visto que el proceso de envejecimiento hace que los procesos inflamatorios se escondan detrás de muchas patologías por ejemplo; cáncer, Alzheimer, diabetes, etc. Estos procesos inflamatorios sostenidos en el tiempo pueden llegar a dañar las neuronas y conduce al cerebro a necesitar ciertos nutrientes de un modo exagerado como; vitaminas del grupo B, antioxidantes o ácidos grasos esenciales.

nutrición en el deterioro cognitivo

Nutrición en el deterioro cognitivo

Sabemos que los antioxidantes no solamente protegen a las neuronas del estrés oxidativo, sino que además mejoran el aporte de oxígeno en el cerebro. Por eso, además de reducir los niveles de inflamación, los antioxidantes ayudan a cuidar el rendimiento cognitivo. Parece redundante hablar también de la importancia de las grasas omega 3 que se encuentran en los pescados azules como; trucha, salmón, bonito, atún…) o frutos secos como; nueces y almendras. Con la ingesta de estos alimentos, podríamos aumentar la prevención sobre el riesgo del deterioro cognitivo.

NUTRICIÓN EN BILBAO PARA EL DETERIORO COGNITIVO

Es importante recordar que además de una buena alimentación, la realización de ejercicios mentales y físicos serán imprescindibles para el mantenimiento y cuidado de un buen funcionamiento cognitivo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.